Ranking oficial de clics, curiosidad malsana y algún que otro accidente de navegación.
Aquí desfilan los artículos más visitados del blog de todos los tiempos: algunos llegaron por méritos propios, otros por puro morbo, y unos cuantos por error, pero ya que estaban, se quedaron. Este ranking no mide calidad ni profundidad filosófica, sino puro clic, impulso y humanidad distraída.
🥇 ¿Por qué están aquí estos artículos?
Porque alguien (tú, otros, Google o el azar cósmico) los ha leído, compartido o se ha caído sobre ellos tras un tropiezo de aburrimiento digital.
Quizá buscaba respuestas, entretenimiento o simplemente huía de una videollamada familiar. Tal vez clicó por error. Da igual. El caso es que terminó aquí, leyendo cosas que no pensaba leer, atrapado por un titular sugerente o una promesa mediocre. Bienvenido
📜 ¿Qué encontrarás aquí?
- Animales enjuiciados por brujería
- Mesas espiritistas con ganas de charla
- Duques que hablaban con sus muebles
- Celebridades desubicadas
- Inventores que casi prenden fuego al siglo XVIII
- Litigios que desafían la lógica, la ley y el sentido común
- Y muchas más joyas de la historia olvidada (y motivos no faltan)
🔥 ¿Son los mejores?
No necesariamente.
¿Son los más clicados? Por lo que sea, sí.
Puede que sea el título. O la imagen. O el algoritmo. O simplemente la atracción humana por lo raro, lo inútil o lo ligeramente ofensivo. Quizá alguien los compartió diciendo “no tiene desperdicio”, y aquí estamos, buscando desperdicio con forma de artículo. No son los más sesudos, ni los más premiados, ni los que salvarán a la humanidad… pero tienen algo. Un qué sé yo que engancha. Como una croqueta caída al suelo: sabes que no deberías, pero ya es tarde. Así que sí, son los más clicados. Y a estas alturas no vamos a fingir que no lo entendemos.
⚠️ Advertencia oficial
Leer más de cinco de estos textos seguidos puede producir:
- Lectura compulsiva de bulas papales
- Confusión sobre la naturaleza del tiempo
- Ganas de estudiar lenguas muertas
- Alucinaciones benignas en forma de abadesas voladoras
- Inexplicable simpatía hacia objetos excomulgados
- Suspiros tipo “no puede ser, ¿esto pasó de verdad?”
Consulte a su cronista local si los síntomas persisten.
📡 Y ahora sí… el Top 50
Entra, curiosea, disfruta.